lunes, junio 27, 2005

Firmas contra el concordato

Si hay un pensamiento mágico por antonomasia es la religión. Ya sea el cristianismo, el judaísmo, islamismo, hinduismo, o cualquier otro -ismo, no dejan de ser mitos acerca de seres mágicos, sobrenaturales, y si algo las diferencian de las hadas, gnomos, o fantasmas del más allá, es que es un pensamiento mágico que consiguió controlar el poder. Afortunadamente, en algunas partes del planeta ha conseguido perderlo. En otras en cambio, todavía queda mucho por hacer.

En España, allá por los tiempos de la transición, la iglesia se resistía a ceder todo el poder e influencia que tenía con el tío Paco. Finalmente, el gobierno llegó a unos acuerdos con la Santa Sede, por los que la Iglesia se aseguraba la financiación a costa de los presupuestos generales del estado, se le eximía de unos cuantos impuestos, y además se le permitía adoctrinar a los niños cuyos padres así lo decidieran en la escuela pública, a pesar de que en la Constitución se definió a España como un país laico.

Ya va siendo hora de dejar de financiar con dinero público este tipo de pensamiento mágico. Por tanto, les invito a que se pasen por www.concordato.org para apoyar una iniciativa para derogar este acuerdo.

Allí además pueden encontrar información acerca de los acuerdos suscritos:
Acerca de la enseñanza
Acerca de la financiación

miércoles, junio 22, 2005

La energía y su mal uso

Una de las armas de la pseudociencia es el uso de términos científicos para dar un halo de respetabilidad a sus afirmaciones. ¿Quién no ha oido hablar de energías que de repente, parecen explicar cualquier cosa por imposible que sea?

Es una palabra perfectamente definida en ciencia, con un significado claro y preciso. Sin embargo, la pseudociencia sólo usa el término, prescindiendo de su significado, o inventándose uno nuevo a conveniencia que se ajuste a lo que se quiere justificar. Y así, es habitual leer u oir esta palabra acompañada de ciertos adjetivos clave: energías desconocidas, positivas, negativas, inteligentes, pura, rojas, verdes, tutti frutti...

La energía como tal no es nada tangible, que se vea o se toque. No es más que una medida de la capacidad de un sistema para influir sobre otro. Es sólo un número que describe al sistema, y que sirve para traducir las propiedades de éste para poder compararlo con otro, y saber qué tipo de interacciones pueden darse.

Por así decirlo, y salvando las distancias, la energía es como el dinero, pero sin monedas. Si alguien tiene un coche, puede venderlo, y con el dinero, comprar una vaca. Si nos saltamos el paso de cobrar en moneda, y vamos directamente a la vieja costumbre del trueque, el coche se transforma en una vaca. Ambos valen el mismo dinero, dinero que no vemos ni tocamos en nigún momento, que sólo sirve para comparar el valor ambos artículos.

Igual ocurre con la energía: cuando una onda de luz eletromagnética pasa a través de una célula solar, la luz se transforma, se troca, por corriente eléctrica; dos sistemas distintos con una misma energía que en ningún momento se ve ni se toca.

La energía pues, no es más que una descripción que sirve para comparar sistemas, y que necesita un adjetivo: energía cinética (partículas en movimiento), energía potencial (energía acumulada que puede transformarse en cinética por estar en una posición determinada), energía electromagnética (una onda de luz), energía de ligadura (enlace entre dos partículas), y así unas cuantas más, entre ellas la más conocida, por la que la materia también se posee una energía (E=mc2).

Estas descripciones en base a un número nos permite comparar sistemas que en principio no tendrían nada que ver. Por ejemplo, un átomo de Uranio, posee unos protones y neutrones que por el hecho de estar enlazados entre ellos, acumulan una energía de ligadura. Cuando un neutrón choca con el átomo y lo rompe, se produce emisión de radiación (energía electromagnética), y los fragmentos salen despedidos a una velocidad (energía cinética) que antes no tenían. Estas energías provienen de la energía de ligadura. Se ha transformado un átomo pesado estático, por dos más ligeros en movimiento, y radiación.

En cambio, el uso que se da en pseudociencia a esta palabra es como si se tratara de algo real que se pudiera tocar con las manos. Se le atribuye una entidad, como si puderia recogerse en un cubo o darle patadas. Cuando se habla de emitir energía, un científico habla de emisión de luz o partículas que con esa energía, ya sea electromagnética o cinética. Sin embargo, para un astrólogo esa energía es algo real que se emite por los planetas, que absorben los humanos, pero que no son nada conocido. Para fotógrafos Kyrlian, o curanderos New Age, la energía es algo que nos envuelve, que emite el cuerpo, o que fluye por él, y que determina nuestro estado de salud.

Pero cuando se habla de energía desconocida en realidad, no se está diciendo nada. Es, una vez más, una definición en negativo, de la que es imposible hacer hipótesis, predicciones y experimentos. Estrictamente sólo significaría que no sabemos qué estamos estudiando. El hecho de saber por qué tipo de energía se describe un sistema, hace que sepamos cómo interacciona con otros sistemas. Sabemos cómo un fotón interacciona con una célula solar, y cómo su energía se transforma en energía eléctrica. Pero de una energía desconocida, no se puede saber (¡por definición!) qué sistema se está describiendo, ni cómo se puede transformar, y por tanto es imposible de saber siquiera si existe.

Lo que si hay en cambio, son las energías negativas y positivas. Pero no tienen nada que ver con lo que se postula en pseudociencia. Para ellos, estas energías equivalen a buenas o malas, que nos benefician, o nos perjudican. Y por supuesto, cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.

Las situaciones interesantes en física se dan cuando hay un intercambio, una variación de la energía, sin importar su valor absoluto. El hecho de poner un signo + ó - delante, no altera para nada el concepto. Simplemente, es un número negativo o positivo. Así, los electrones dentro de un átomo se describen por una energía negativa, que representa una energía de ligadura, energía que hay que darles (con rayos X, un electrón con energía cinética suficiente, un campo eléctrico intenso...) para ser arrancados del núcleo. Cuando se le da suficiente energía al electrón, una primera parte (hasta que la energía del electrón varía hasta cero), se emplea en arrancarlo del núcleo. El resto se emplea en darle una energía cinética.

Nada que ver con la salud ni con poltergeists.

Aunque quizás haya que agradecer el mal uso de este término, porque así es bastante sencillo reconocer una pseudociencia en seguida. Y no es la única palabra. Algún día hablaremos de otras.

martes, junio 14, 2005

Preparándonos para un eclipse

Hoy vamos a hacer un descanso en esto de pelear contra el pensamiento mágico, y vamos a hablar de chapuzas caseras.

El próximo 3 de Octubre, en España vamos a tener la suerte de ver un eclipse solar anular. Lunes, a eso de las 11 de la mañana. Si habías quedado ya, desqueda.

Al que suscribe, que no ha vivido lo suficiente como para estar aburrido de ver estos fenómenos astronómicos, le gusta tener recuerdos de estos momentos. He aquí el tránsito de Venus del año pasado, proyectado con un catalejo.

Así que nos estamos preparando para poder fotografiar el suceso, y vamos a compartir la experiencia por si a alguien le parece interesante y se anima a hacer lo mismo o le da ideas para algo.

Podemos coger y hacerle una foto al sol directamente con la cámara. Pero la experiencia que tengo de fotografiar alguna puesta de sol, es obtener un disco rojo, sobre las siluetas de unas montañas... muy bonito, pero el sol se ve muy pequeño para mi gusto. A las 11 de la mañana, sospecho que quemaré la película, y no saldrá nada.

Uno no es rico, así que no tiene para comprarse objetivos y filtros especiales, que seguro que se venden. Y además, siempre da gusto el chapucearse uno mismo las cosas.

Así que hemos optado por fabricarnos una cámara oscura, (una "cámara de agujero"), pero usando una cámara reflex, a la que se puede quitar el objetivo, y ajustar tiempos de exposición. Y en su lugar colocar unos tubos de PVC, con una tapa a la que le hemos hecho un agujero de un milímetro en el centro, y sobre él, un trozo de papel de aluminio, donde se ha hecho un agujero con una aguja... así a ojo, es de unas 3 décimas de milímetro de diámetro. Cuanto más pequeño, más nítida es la imagen. Así, tenemos un tubo de unos 15 cm de longitud, con un agujero que forma una imagen, ampliada además, sobre la película. Simple, barato, y además, con la facilidad para manejar el carrete que da la cámara.

A quien le interese el funcionamiento de una cámara oscura, le remito a un enlace: un enlace , que lo explicará mejor que yo.

Normalmente, cuando se hacen fotos de objetos, personas, o paisajes con estas cámaras, se necesita bastante tiempo de exposición, porque la luz que entra es una fracción muy pequeña. Sin embargo, del Sol eso es precisamente lo que nos sobra, y aún con un agujero tan pequeño, el sol es brillante, (aunque no deslumbra) a través de la mirilla de la cámara. Así que con poco tiempo de exposición, con un carrete normal [ISO100, aunque quizás con uno menos sensible sería mejor (?)] es posible hacer una foto nítida.

Para quien no tenga cámara que se pueda acoplar, puede optar por la chapuza "B": añadir una segunda sección de tubo, con un extremo tapado con un papel pegado, pero mojado con aceite para que sea translúcido. El extremo del papel se coloca a continuación del "objetivo", y se mira por el otro extremo. Si miras directamente al Sol, verás un punto luminoso sobre el papel. Eso si muy pequeño, así que si quieres ver algo más llamativo, tendrás que aumentar con más tubería la distancia del agujero al papel. Ten en cuenta que la distancia mínima a la que enfoca un ojo son unos 15 cm forzándolo, asi que entre el papel y tu ojo debes dejar una distancia así para poder ver bien la imagen.

Como última curiosidad, con éste último "invento", si el día está nublado, pero es muy luminoso (al atardecer, con el sol tapado por nubes finas), podrás llegar a ver la imagen de las nubes, y la silueta del horizonte... eso sí, del revés.

Aquí, una foto que hice de la imagen que se forma sobre el papel con una cámara digital cutre en un atardecer nublado pero luminoso. Se ve el sol difuminado en las nubes, el horizonte y una farola que había en medio. Si tienes una cámara buena, que permita ajustar la sensibilidad y el tiempo de exposición, quizás las consigas mucho mejores. Tendrás que ajustar el brillo y contraste del monitor para llegar a ver algo, porque es muy oscura.
(La foto de la farola es otro día distinto, que ya estaba encendida)

Pues nada, cuando llegue el eclipse ya enseñaremos las fotos que se consigan, si quedan bonitas.

(Nota mental: Para el eclipse solar total del 12 de Agosto de 2026, a las 8.25 de la tarde, visible desde Burgos, hay que inventarse algo... tiempo hay.
Post data: 12 de Agosto de 2026 a las 8.25 de la tarde en Burgos... eso es una predicción y no la astrología)